Si, como yo, estabais impacientes por saber que había ocurrido con la detención del chico del bate, tendréis que esperar al siguiente capítulo. Aunque al principio sienta un poco mal que alarguen otro episodio el misterio, este capítulo es (como casi todos) muy bueno y hará que nos olvidemos rápidamente de nuestra impaciencia.
El guerrero
El episodio comienza justo donde lo dejamos en Double Lips: una pareja sale a la calle (como curiosidad fijaos en la camiseta de la chica, saldrá una igual pero de otro color al final del capítulo) y se encuentra a Harumi tirada en el suelo, recién agredida por el chico del bate. En seguida la información llega a las noticias: el chico del bate ha atacado de nuevo y, como ya pasó con Ushiyama, la víctima está relacionada con Ichi. Pero los periodistas y la policía siguen preguntándose lo mismo, algunas víctimas están relacionadas con Tsukiko y otras con Ichi, ¿pero qué conexión hay entre ellos dos?
Mientras todo el mundo intenta averiguar que está ocurriendo, un viejo amigo está viajando en el metro: Hirukawa, el policía (mejor dicho, guardia de tráfico) que se acostaba con María en el capítulo anterior. Nuestro nuevo protagonista está hablando con alguien por teléfono, que le informa de que la nueva víctima del chico del bate era María, y le pide alguna clase de favor que, de momento, desconocemos. Mientras el metro sigue moviéndose vemos un cartel que anuncia el manga que da título al episodio: El camino de un hombre.
Este comic será el epicentro de todo el capítulo: Hirukawa es aficionado a él, y todas sus acciones las irá comparando con las acciones del protagonista. Pronto descubriremos que mientras para el protagonista del manga el camino termina en salvar a una bella dama, para el policía acaba en obtener la casa de sus sueños, y no dudará en hacer todo lo que esté en su mano para conseguir que esa casa se construya. A lo largo del episodio iremos viendo los caminos de los dos hombres comparados, y la gran diferencia que hay entre ellos, debido a la forma que Hirukawa tiene de tergiversar su realidad para ajustarla a la del comic.
Volviendo al capítulo y como era de esperar tras un nuevo ataque, aparecen de nuevo los policías, que esta vez hablan con Hirukawa sobre los ataques. Hirukawa se pregunta bastante hábilmente como es posible que no tengan un retrato robot del asaltante si ya han atacado a cuatro personas, a lo que el jefe de policía (Ikari) le corrige: Harumi Chono es la quinta víctima (irónicamente en el siguiente capítulo se nos desvelará que ninguno de los dos tenía razón).
Después de unos segundos de conversación descubrimos que Hirukawa y el jefe de policía son viejos amigos, y ambos comienzan a hablar sobre la casa que Hirukawa se está construyendo. “Siempre has sido la clase de tipo que valora a su familia por encima de todo” dice Ikari, pero en seguida dudamos de ello: ya vimos como en el capítulo anterior el guardia se acostaba con María, por lo que es difícil creer que dedica toda su vida a su familia. Aún así y aunque parezca lo contrario este personaje tiene su complejidad y en algunas ocasiones dudaremos de si realmente es tan malo o está diciendo la verdad cuando habla de su familia. La balanza se inclinará dentro de un par de capítulos, cuando se nos desvele otra de sus “motivaciones” para construir la nueva casa.
Pa-pa-í-to
Volviendo de nuevo al episodio que nos ocupa vemos como Hirukawa se acaba de reunir con el hombre con el que hablaba anteriormente en el metro. Al parecer este hombre dirige una red de prostitución, a la que pertenecía María, y no quiere que se sepa que ella es la nueva víctima del chico del bate. Hirukawa, que es el único que lo sabe, decide sobornarlo: le pide un poco de dinero y una “compañera” para pasar la noche a cambio de mantener la boca cerrada. Durante su cita con la chica que le cederá el mafioso, volverá a decir lo que ya le oímos en el capítulo anterior: quiere que le llame “papá”. Por la cara de loco que pone cuando se lo pide a la prostituta ya empezamos a deducir que no está muy bien de la cabeza.
Hirukawa, como ya se veía venir desde el capítulo anterior, no solo es un pervertido sino también un hipócrita, y el autor de la serie quiere que nos quede claro: mientras Hirukawa dice que su familia es lo más importante del mundo para él, vemos de fondo imágenes de todas sus citas con prostitutas, sus noches en el casino o sus reuniones con el jefe de la red de prostitución. Desde luego, no parece que este haciendo todo eso por su familia. ¿Es consciente de que realmente esa no es la forma de “cuidar” de su familia, o realmente cree que está siguiendo el camino correcto? este episodio nos dice indirectamente que es lo segundo: Hirukawa cree que está siguiendo el camino que debe seguir todo hombre.
Tras el pase de diapositivas vemos la primera relación entre el comic y la vida del policía: el guerrero se enfrenta a unos ladrones que le ordenan que les devuelva su dinero, a lo que éste responde dándoles una buena tunda con una espada de madera. Algo parecido a lo que le va a ocurrir al guardia en unos instantes: el hermano de Handa (que suponemos será el mafioso al que Hirukawa sobornaba al principio del capítulo) le hace subir a un coche y le pide dos millones de yenes, ya que según él, Handa va a casarse y necesita que sus amigos le ayuden a pagar la boda. Pero a diferencia del guerrero, Hirukawa decide inteligentemente no enfrentarse a los mafiosos y decirles que conseguirá el dinero, a pesar de lo cual el hermano de Handa le apaga un cigarrillo en su frente como “recordatorio”.
Hay dos cosas curiosas en esta escena, las dos relacionadas con el hermano de Handa. La primera es que él también tiene la marca de cigarrillo apagado en su frente, por lo que entendemos que alguna vez tuvo que enfrentarse también a algún mafioso, antes de convertirse en uno de ellos. La segunda es que como casi todos los personajes aparecerá de nuevo, durante unos segundos, en el último capítulo, y veremos que además de la marca en la frente comparte otras cosas con Hirukawa.
Los nuevos tiempos
Tras la petición de los mafiosos Hirukawa se encuentra en apuros, no tiene dinero y ya no puede extorsionar a nadie para conseguirlo, por lo que decide poner en práctica un nuevo plan: robar. A pesar de ello consigue solo un millón, y cuando lo entrega le piden dos más, ya que parece ser que Handa ha sido hospitalizado.
De nuevo vemos una captura del comic: la chica le pide al guerrero que no se enfrente más a los ladrones ya que acabarán matándole, a lo que este responde que no puede detenerse ahora ya que ese es “El camino de un hombre”. Hirukawa por su parte hace todo lo contrario: a pesar de que quiere, no se enfrentará a los mafiosos, pues lo único que le importa es que su casa termine de construirse.
Después de presenciar un extraño sueño, en el cual Hirukawa intenta atracar a una mujer vestida de blanco para después descubrir que es Harumi (algo que cabe preguntarse es: ¿cómo sabe Hirukawa el aspecto que tenía Harumi cuando la encontraron en el callejón?), volvemos a escuchar la historia del guerrero: mientras habla del camino que tiene que seguir como “guerrero solitario” vemos imágenes del camino que está siguiendo Hirukawa. De nuevo el contraste es perfecto y hace que la vida de Hirukawa parezca mas triste incluso de lo que es, ya que se cree un guerrero solitario que está luchando por una buena causa, mientras lo que vemos es a un ladrón vestido con un chandal y una capucha rosa y atracando a personas de forma bastante torpe.
Tras estas escenas Hirukawa recibe una nueva visita del mafioso, que de nuevo le pide más dinero, pero esta vez en lugar de quemarle la frente le regala una pastilla, para que se “alegre”. Como podemos ver Hirukawa está ya en las últimas. A pesar de todas las cosas malas que le hemos visto hacer, robar es algo que le hace sentir culpable, pero es la única forma que tiene de terminar su casa y mantener a su familia.
Por ello decide tomar la pastilla y llevar a cabo un último robo. De nuevo aparece la historia del guerrero en esta escena, y es una de las mejor conseguidas: mientras que el guerrero está salvando a una chica, Hirukawa inspirándose en él está robando los ahorros de toda su vida a una familia indefensa. Por el efecto de la pastilla le vemos incluso recitar algunas frases del comic, lo que hace la escena aún más ridícula.
Una vez cometido el robo se sienta en los columpios de un parque, todavía claramente bajo el efecto de las drogas, y se encuentra con su viejo amigo el jefe de policía, que le invita a tomarse unas copas en un bar. Allí descubrimos que Ikari no estaba tan seguro como parecía de poder encontrar una conexión entre las víctimas del chico del bate: los tiempos están cambiando, dice, y puede que entre los crímenes no exista ninguna conexión, sino que simplemente sean ataques indiscriminados a diferentes personas sin relación alguna.
Los asesinos, dice, ya no tienen ninguna razón para matar, sino que simplemente matan por matar, lo que hace que sea muy difícil encontrar relaciones entre sus víctimas (aunque tiene razón al hacer esta reflexión sobre los nuevos tiempos, se equivoca con respecto al chico del bate). Aún así no se rinde, y asegura que atrapará al culpable, aunque tenga que adaptarse a los nuevo tiempos, a lo que Hirukawa contesta con un par de frases tontas (lo que tiene mezclar las drogas con la cerveza).
¿La sexta víctima?
Tras la reunión le vemos claramente fuera de si, va andando por la calle, lamentándose del camino que ha tomado su vida, mientras pide a gritos que alguien le ayude. Después de haber visto tres capítulos (casi cuatro) le tenemos ya cogido el truco, y pensamos que en efecto, hay alguien que puede “ayudarle”. Pero entonces nos planteamos algo: ¿está realmente tan desesperado como parece en esta escena? ¿No tendrán algo que ver las drogas y el alcohol en todo lo que está diciendo? ¿Necesita tanto como dice la ayuda del chico del bate?
Sin tiempo para que sigamos planteándonos estas cuestiones comenzamos a escuchar la música que anuncia la llegada del chico del bate. Pronto nos daremos cuenta de que esta escena tiene algo extraño: cuando Hirukawa es atacado vemos perfectamente la cara del chico del bate sonriendo, cosa que hasta entonces no había ocurrido. Por otro lado el chico del bate no desaparece tras la agresión, sino que se queda esperando a ver que ocurre, algo fatal ya que para su desgracia Hirukawa se levanta y le derriba de un zapatazo, en una escena bastante cómica.
En seguida vemos que algo muy extraño está pasando ¿Por qué hemos podido ver la cara del chico del bate, si tras 5 agresiones nadie había conseguido vérsela? ¿Por qué no ha huido tras atacar a Hirukawa en vez de quedarse esperando? ¿Cómo es posible que Hirukawa se haya podido levantar tras el golpe, si todas las anteriores víctimas habían quedado totalmente inconscientes tras la agresión? Y lo más importante, nosotros teníamos al chico del bate como un ser medio sobrenatural, capaz de identificar a la gente con problemas y “liberarla”, ¿cómo es capaz de hacer eso y no puede esquivar el zapato que se le viene encima?
Como ya sabréis los que hayáis visto la serie la respuesta a todas estas preguntas es sencilla: Hirukawa no ha sido atacado por el auténtico chico del bate (algo que descubriremos en el capítulo siguiente). Sin embargo, con intención de despistarnos se le añaden a la agresión cosas características del chico del bate: la música, o el hecho de que antes de dar el golpe solo le veamos los pies al chico.
Lo de la música puede dar lugar a reflexión: ¿podría ser que Hirukawa estuviera realmente en su límite y el chico del bate fuera a aparecer, pero el falso chico del bate se metiera en medio e “interrumpiera” la tensión que caía sobre Hirukawa? ¿O es simplemente que el autor ha querido despistarnos y hacernos creer que era el auténtico chico del bate el que llegaba? ¿Era entonces la aparente tensión de Hirukawa efecto de las drogas, o realmente estaba tan desesperado? Aún así, como ya he mencionado en el párrafo anterior, detrás de estos detalles para despistar, hay otros muchos que ayudan a darse cuenta de que no ha sido una verdadera agresión del chico del bate.
Y así llegamos al final de este capítulo. Como prometí, podéis ver entre los espectadores que están escuchando a Hirukawa en la rueda de prensa, a un hombre con una camiseta blanca de Maromi, idéntica a la que llevaba la chica del inicio del episodio. En el siguiente capítulo por fin veremos lo que estábamos esperando: los policías apagan las noticias mientras anuncian que el chico del bate ha sido capturado. Un hombre entra la sala, y anuncia que el interrogatorio está preparado: queda poco para escuchar la confesión del falso chico del bate.
Próximamente: El guerrero sagrado
Posiblemente el mejor review de uno de los mejores capítulos.
ResponderEliminarMe encanta Hirukawa, es un personaje muy complejo y que transmite un montón de emociones, muchas de ellas cercanas a la repulsión o a la pena.
Muy interesante los detalles que se plasman y que luego se responden de manera cruda, como el tema de la casa y la familia de este tipo, tema sólo perfilado en este capitulo.
Además, tiene un final muy interesante que hace imposible aguantar para ver el próximo episodio.
Gran trabajo! Espero que el ritmo no decaiga y pronto leamos "El guerrero sagrado", donde la serie empieza a pisar el acelerador hacia la complejidad.
SALUDOS!
Loquo
Como va la cosa? Tendremos pronto otro capi comentado?
ResponderEliminarSaludos!!
Saludos!! Perdon por no avisar pero estuve un poco liado los ultimos dias y se me olvido completamente. Ahora mismo estoy de vacaciones de un lugar un poco lejano, y no volvere hasta el dia 9. Ademas tengo un examen e dia 11 asi que no creo que me sea posible escribir la siguiente entrada hasta mediados de septiembre. Pido disculpas de nuevo por no haberlo dicho, intentare escribir algo antes de septiembre, pero no se si el examen y el ajetreo que hay por aqui me lo permitiran.
ResponderEliminarSaludos desde San Francisco!! :)
En San Francisco!! Qué guay!! Jeje.
ResponderEliminarNada tío tranqui, pásalo bien y a por todas en el examen. Mejor que esperes a estar menos liado que colgar algo con prisas.
Un saludo!
Cuanto tiempo...
ResponderEliminarHe de reconocer que la forma que tiene Vals de relatar los capítulos es magistral ¡Enhorabuena Vals y muchas gracias!
Cuando me vi la serie, prácticamente del tirón, creo que aquí es cuando pensé en más profundidad sobre el contenido simbólico y social del Chico del bate, y su utilidad.
Las agresiones hasta ese momento, tenían tres características principales según yo lo entendía: eran personas con problemas, la agresión ocurría sin que nadie la presenciara más que la víctima, y tras la agresión la persona ya no tenía problemas (caso aparte es Tsukiko, que simplemente gana tiempo y no resuelve sus problemas ...)
Pero fue aquí donde descubrí algo más. Las victimas del chico del bate afrontan sus problemas con cierto infantilismo, y la salida del Chico es una salida "fácil" a problemas unos más graves que otros, pero en cualquier caso muy importantes para los que los sufren.
¿Los problemas de la vida real se resuelven tan milagrosamente?
Pero Hirukawa es realmente, y aunque parezca lo contrario por los tintes comicos que introduce el autor, una persona que se encuentra en un mundo depravado, es hipócrita, inmoral, pero que por encima de todo sabe que la vida es dura y no puede venir un chico del bate a sacarle las castañas del fuego.
Hirukawa está metido en robos, corrupción, mafia. ¿El Chico puede salvarle milagrosamente de ese entorno? A todos los protagonistas anteriores la agresión les sirve para salvar su situación de tensión. EL batazo les hace quitarse presiones, cambiar su visión de los temas o incluso tiene el efecto benéfico de curar una personalidad doble, pero el autor nos muestra una mejoría evidente. Aquí el Chico no puede ayudar a Hirukawa ¿es así por la naturaleza de los problemas o por que hirukawa lo que podemos llamar un "verdadero adulto"?
Y aquí viene mi hipótesis parcial, que se confirmará o no según avance la serie. Los ataques y el mecanismo liberador solo sirven para aquellos que tienen mentalidades infantiles. No es útil para mentalidades "adultas", como la de este complicado personaje en apariencia, que en el fondo sólo es alguién que se ha metido en problemas profundos y no sabe salir de ellos.
No pensemos que el creerse el héroe del manga invalida el caracter adulto del personaje. El manga es algo muy serio en Japón como sabéis, incluso una fuente de enseñanzas, y Hirukawa encuentra un modelo en el héroe de su historia.
¿La Sociedad que se nos refleja no sabe afrontar los problemas de frente y necesitan un Chico del Bate? La serie gana en complejidad, y el falso chico del bate supone un punto de inflexión en lo que creíamos que sabíamos, y además creo que se salta de una trama de historias particulares con conexiones, a lo que podría ser un análisis social ¿Es esta reflexión demasiado aventurada?
Espero vuestros comentarios.
Muchas gracias a todos, y especialemtne a Vals.
Aprovecho para decir que en 4 dias acabo los examenes (al fin!) y sera un placer retomar los analisis despues de tanto tiempo, sobretodo siendo el proximo capitulo "Los planes de la familia feliz". Gracias a todos por vuestra paciencia, y a los nuevos lectores bienvenidos! :)
ResponderEliminarSaludos
EDIT: Elimino estos ultimos comentarios ahora si. No pasa nada cazademonios, un fallo lo tiene cualquiera :)
Muy a parte de la historia de nuestro policía en este capi, tengo que admitir que en el momento en el que empieza a golpear al "chico del bate" sentí una mezcla de desilusión con impaciencia, interés y confusión. Yo nunca me creí que fuera él, no tanto por los detalles (ahora me doy cuenta de que no soy tan observadora xD) sino porque, respecto a esta serie, me sitúo en uno de esos casos donde estás del lado del "malo", en este caso el chico del bate. Y como fan del mismo, no pude creer que se le pudiera capturar tan fácilmente
ResponderEliminarMe quedo con un par de dudas en este capi: como dices, ¿cómo supo él cómo se veía Harumi aquella noche? Otra: ¿le hizo algo a la niña que venía llegando a casa el día del último robo? Me dio la impresión de que despertó lascivia en él, y por su edad no me sorprendería que viera en ella la imagen de su hija.
Creo que son detalles insignificantes, pero igual me quedé con el gusanito.
¡Aaaah! creo que me voy a leer todas las entradas en un día, jaja. De por sí la serie me la bebí en 3 noches... Es como un libro que no puedes soltar.
Vals...no se que ha pasado...pero es necesario más que nunca tus analisis de los últimos capítulos...así que...ánimo...no dejes inconclusa una gran labor...adelante...
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